Plaza de toros de Pontevedra año 1897

TEMPORADA 1897

1ª NOVILLADA

19 DE SEPTIEMBRE DE 1897

Cualquiera diría que de aquel sencillísimo circo ecuestre, hecho ligeramente con cuatro tablas y otros tantos clavos, reducido y abigarrado,  podría hacerse una “petit” plaza de toros con sus correspondientes palcos cubiertos, su gradería, sus barreras y hasta su ruedo más o menos reducido.

Y sin embargo se hizo. Aquello tenía ayer el aspecto de una verdadera plaza de toros mirada a través de un microscopio.

Banderas nacionales y gallardetes por todas partes, mucho bullicio, mucha animación, mucha nota cómica y hasta su poco de bronca a última hora por si había o no de echarse  otro novillo a la arena para los aficionados.

El público bastante numeroso y en los palcos algunas damas elegantes y guapas.

Presidía el secretario del gobierno civil Sr. Peñalosa, elemento indispensable por su gran competencia taurina, en todas las fiestas de este carácter.

Se lidiaba ganado de Paz, y llamabanse los bichos “Marquesito” el primero, “Costurero” el segundo, “Hermanito” el tercero y “Escribano” el cuarto.

No se han portado del todo mal los animalitos, a pesar de haber llegado a Pontevedra el día anterior con los mareos propios de un viaje largo y accidentado porque los novillos viajaban en el tren que descarriló días pasados en la línea de Castilla.

Bravos y de mala intención, aunque mal armados, dieron algunos sustos y han puesto en situación difícil a los bichos.

Estos, como es natural, no pueden satisfacer absolutamente a espíritus exigentes que olvidan que un novillero no es ni debe ser un verdadero diestro del cartel.

Como novilleros nada dejan que desear, saben responder a las modestas exigencias que el espectáculo requiere y son dignos del aplauso con que el público los recibe.

Ayer han hecho cosas bonitas con los novillos y revelaron su arrojo en la suerte de capas.

“Palacios” y “el Pollo Nimes”, sobre todo, han tenido momentos felices.

El último y “Martinillo” han esperado dos veces de rodillas a los bichos, sufriendo uno de ellos un tremendo revolcón…sin consecuencias.

Tampoco han faltado banderillas en silla.

El animal “Costurero”, enredose una pata en aquella y costó dios y ayuda para desprenderlo.

“Palacios”  ha puesto un par muy regular al último cornúpeto.

Matando ha estado bien como novillero. Despachó a los cuatro bichos de otras tantas estocadas hasta el puño.

El público pasó agradablemente la tarde, ha reído a mandíbula batiente los múltiples incidentes de la lidia.

La presidencia superior.

Y hasta el Domingo.

2ª NOVILLADA

26 DE SEPTIEMBRE DE 1897

Los diarios locales hacen una pequeña reseña sobre la novillada diciendo que los novillos estaban mucho más descansados que los del festejo anterior, y que dieron muy buen juego excepto el lidiado en último lugar.

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